Observo la noche en calma
Escucho la soledad
Prisionera aguarda mi alma
A su luz de verdad
Mi corazón es un tictac incesante
Como un detonante de mi ser
Horas ambarinas me abandonan y se parten
Tiempo vano perdido en el ayer
Oigo un llanto en el noche fría
Que me estremece el alma
Rememorando viejas heridas
El llanto de una niña
Asustada y entumecida
Vaga perdida por la corteza del mundo
Sus lágrimas empañan el camino a cada segundo
El temor me embarga
Intento buscarla
Sigo su rastro
Intento salvarla
El tiempo transcurre
Olvido…
El miedo me nutre
Y olvido…
Me dejo arrastrar
Ya nada importa
Estas aguas me transportan
No sé si me deba adentrar
Pero…
¿Tengo elección?
¿La tengo?
Me adormezco en los brazos del destino
Y abandonada al sopor…
Pienso.
Los recuerdos me invaden
Las mareas me llevan
Las lágrimas que caen
Son cadenas que me apresan
¡La oigo gritar!
Es ella otra vez
Perdida en la inmensidad
Ensombrecida mi lucidez
Intento disipar la bruma
Trato de hallarla en la espesura
¡Me esta matando!
Es esta urgencia que me domina
El tiempo transcurre
Tictac…
La confusión no termina
¿Dónde estás pequeña?
¿Por qué te has perdido?
Déjame tan solo una huella
Guíame en este pasadizo
La oigo…
¡Me esta matando!
Intento ayudarla
Sigo su rastro
Intento encontrarla
Por fin hallo sus lágrimas
Caídas como diamantes
Sobre un suelo lapidado
Que no había visto antes
El cielo se aclara
La veo en la espesura
Allí ensombrecida por sus miedos
Me aguarda esperanzada
Más cuando al fin la alcanzo
Tan solo hallo un espejo
Que me devuelve la calma
Y mi reflejo.
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